
Desde la Maestría en Educación Física se identifica y reconoce la importancia que ha tomado la Actividad Física para la Salud como principio y eje fundamental de Bienestar para las comunidades
Desarrollo Humano y Actividad Física: Formación para el Bienestar Social
Desde su mirada integral y epistemológica que se cimenta desde el fundamento de la Motricidad y el Desarrollo Humano, le permite al futuro maestrante desde su formación y líneas de énfasis reconocer los principios curriculares para promover el desarrollo y abordaje integral de escenarios académicos y científicos en torno a la formación teórica y metodológica del campo disciplinar de la educación física, de esta forma el futuro maestrante podrá tener mayor pertinencia respondiendo a las expectativas y requerimientos sociales, educativos y académicos, en el marco de las necesidades de desarrollo científico, pedagógico y disciplinar de la región y el país.
Recordando que la Maestría en Educación Física se sustenta en un enfoque de profundización que permite convocar diferentes campos de conocimiento, por tanto, se pone en diálogo con aquellas disciplinas y ciencias que guardan relación temática con el campo de la salud, que le permitirá al futuro maestrante caracterizar y relacionar ¿dónde y cómo? se pueden desarrollar habilidades físicas, cognitivas, emocionales y sociales que contribuyen a un estilo de vida saludable y activo de una forma más crítica y socialmente contextualizada a sus necesidades, de esta forma el maestrante podrá interactuar y plantear propuestas que permitan beneficiar a las comunidades con las siguientes estrategias:
Mejora de la condición física: La educación física ayuda a mejorar la fuerza, la resistencia, la flexibilidad y la coordinación, lo cual es fundamental para mantener un cuerpo saludable.
Desarrollo de habilidades sociales: A través de actividades deportivas y de equipo, los individuos aprenden a trabajar en grupo, a comunicarse eficazmente y a desarrollar el espíritu de equipo y el liderazgo.
Promoción de hábitos saludables: La educación física enseña la importancia de una alimentación balanceada, la hidratación adecuada y la práctica regular de ejercicio, hábitos que son esenciales para prevenir enfermedades crónicas.
Bienestar emocional: La actividad física regular está relacionada con una mejor salud mental, reduciendo el estrés, la ansiedad y la depresión, y promoviendo una sensación general de bienestar.
Integración social: Las actividades físicas y deportivas pueden ser un medio para integrar a diferentes grupos de la comunidad, promoviendo la inclusión y la cohesión social.
Educación en valores: A través de la educación física se pueden inculcar valores como la disciplina, el respeto, la perseverancia y la honestidad.